Tu corazón tiene neuronas.
Literalmente.
Se llaman “neuronas intracardíacas” y forman parte de un pequeño “cerebro del corazón” (también conocido como el sistema nervioso intrínseco del corazón).
Este mini-cerebro puede recordar, sentir y enviar señales al cerebro real, ¡sin que el cerebro se lo pida primero!
Por eso hay veces que sientes cosas antes de pensarlas.
Y por eso también, cuando dices “lo sentí en el pecho”, no es solo poesía… es neurociencia emocional pura.